Educación, la gran deuda de nuestro país con San Miguelito.

Los retos del distrito más diversificado de nuestro país.

Cuando hablamos de educación, lo primero que se nos viene a la cabeza es falta de voluntad. En San Miguelito podemos encontrar escuelas deterioradas, sin mantenimiento, niños cruzando ríos para llegar a la escuelas, niños sin comer llegando a las escuelas para llegar a su casa sin luz para poder estudiar, son todos los retos que sostiene la educación pública en nuestro país, podemos imaginar una escuela sin agua, niños y jóvenes que caminan horas para llegar a su lugar de estudios y así nos podemos llenar la cabeza de problemas para los que muchas veces se necesita más que una solución.

Lo cierto es que, nuestro país, tiene una deuda gigante con respecto a la educación, y las víctimas, resultan ser los jóvenes que no son el futuro, son el ahora de nuestro país.

San Miguelito, es el segundo distrito con más población de todo Panamá, es el más diversificado con respecto a la educación en nuestro país, contamos con muchos centros educativos de muy buena calidad y condición económica, así como a unos cuantos metros, podemos encontrar centros en alto grado de deterioro y lo más grave es que, en este distrito, tasa de reprobados es del 8.5% cuando el valor nacional es 7.9% en media, es decir, más de 5,700 jóvenes de nuestro país, siendo esta la causa de al menos el 12% de la deserción escolar.

Mis propuestas

Mis propuestas buscan atacar esta situación por medio de defender el 6% de inversión del presupuesto nacional dirigido a educación, fortalecer la educación bilingüe en escuelas gubernamentales, impulsar los procesos de la transición a la vida adulta, como educación financiera, sistema de pensiones, pago de impuestos, legislar para que el Ministerio de Educación se comprometa a la igualdad de oportunidades para todos los panameños, trabajar en políticas públicas para impulsar la creación de centros de tecnología públicas, exoneración del pago por el uso de transporte masivo a estudiantes, obtención de becas mediante el mérito, y no amiguismo, entre otras.

Yo, soy un fruto de la educación gubernamental en nuestro país, por ende, conozco muy bien sus debilidades, pero sobre todo, conozco de primera mano, el impacto que estas propuestas van a tener en la vida de cada uno de los jóvenes que puedan beneficiarse de ellos. Es cierto que tener una mejor calidad de vida, es en parte, responsabilidad y compromiso de cada uno de nosotros, pero tenemos una gran responsabilidad con la educación gubernamental de San Miguelito.

Es por eso que, quiero invitarlos a involucrarse, juntos podemos ser agentes de cambio, está en nuestras manos que nuestro país, tenga un mejor destino y esto, solo lo vamos a conseguir por medio de la educación, esa llave del futuro que nos puede garantizar ciudadanos más conscientes, modernos y comprometidos con nuestro país, cuando una educación de calidad sea más accesible a todos, Panamá podrá afrontar con éxito los retos que el país afronta en cualquier campo.